martes, 30 de abril de 2019

De “Siddaharta”. Hermann Hesse.


«EI mundo, amigo Govinda, no es imperfecto, ni se encuentra en un camino lento hacia la perfección. No; él es perfecto en cualquier momento. Todo pecado ya lleva en sí el perdón, todos los lactantes, la muerte; todos los moribundos, la vida eterna. Ningún ser humano es capaz de ver en el otro en qué situación se halla dentro de su camino: en el ladrón y en el jugador espera el buda, en el brahmán espera el ladrón».
«En la profunda meditación existe la posibilidad de anular el tiempo, de ver toda la vida pasada, presente y futura a la vez, y entonces todo es bueno, perfecto: es Brahma. Por ello, lo que existe me parece bueno; creo que todo debe ser así́, tanto la muerte como la vida, el pecado o la santidad, la inteligencia o la necedad; todo necesita únicamente mi afirmación, mi buena voluntad, mi conformidad de amante: entonces es bueno para mí, y nunca podrá́ perjudicarme».
«He experimentado en mi propio cuerpo, en mi misma alma, que necesitaba el pecado, la voluptuosidad, el afán de propiedad, la vanidad, y que precisaba de la más vergonzosa desesperación para aprender a vencer mi resistencia, para instruirme a amar al mundo, para no compararlo con algún mundo deseado o imaginado, regido por una perfección inventada por mí, sino dejarlo tal como es y amarlo y vivirlo a gusto».

sábado, 27 de abril de 2019

"SE COMO UN MUERTO" - BUDA


Era un venerable maestro en sus ojos había un reconfortante destello de paz permanente.

Solo tenía un discípulo al que paulatinamente iba impartiendo la enseñanza mística, luego de años de enseñanza, un día el maestro se dirigió al discípulo y le ordeno.                                          

¡Acércate al cementerio y una vez allí con toda la fuerza de tus pulmones comienza a gritarles toda clase de halagos a los muertos!

El discípulo camino hasta un cementerio cercano, el silencio era sobrecogedor quebró la apacible atmósfera del lugar gritando toda clase de elogios a los muertos.

Después regreso junto a su maestro ....

¿Qué te respondieron los muertos? - pregunto el maestro.

¡Nada dijeron!, contesto el discípulo.

¡En ese caso vuelve al cementerio y lanza toda suerte de insultos a los muertos!, le pidió el maestro.

El discípulo regreso hasta el cementerio y con todas sus fuerzas comenzó a soltar toda clase de improperios contra los muertos, después de unos minutos volvió junto al maestro que le hizo la misma pregunta y obtuvo la misma respuesta.

De nuevo. nada dijeron.

Y el maestro concluyo .......

!ASÍ DEBES SER TU, INDIFERENTE COMO UN MUERTO A LOS HALAGOS E INSULTOS DE LOS OTROS!

Cuando estamos apegados a lo que digan los demás sobre nuestras acciones, la paz interior está muy lejos.

Si vivimos de los halagos o nos sumergimos en la angustia cuando alguien nos critica es probable que no lleguemos a conocer la serenidad.

Para los tibetanos permanecer en uno mismo, más allá de unos y de otros es el correcto camino que seguir.

miércoles, 24 de abril de 2019

EL ALIVIO - Cuento Sufí

Un día, habiendo entrado en éxtasis, un sufí desgarró su túnica. Llamó a este vestido FERRACE (alivio). Esta denominación hizo fortuna y todos quisieron llevar tal vestido, pero sólo el precursor conoció el alivio. La multitud, por su parte, sólo tuvo el poso del vino. Una cosa puede ser pura en su interior, pero el
nombre de la cosa es como el poso del vino para los seguidores. Si realmente deseas conocer la verdad, desgarra también tu túnica y conocerás el alivio.
Sufí es el que busca la pureza. ¡No creáis que es cuestión de atavío o asunto de sastre!

lunes, 22 de abril de 2019

Otro mensaje del Papa Francisco


Esta vida se va a ir rápido, no pelee con la gente, no critique tanto su cuerpo. No se queje tanto. No pierda el sueño por las cuentas. No deje de besar a sus hijos y a su pareja. No se preocupe tanto en dejar la casa impecable. Los bienes y patrimonios deben ser ganados por cada uno, no se dedique a acumular herencia. Permita tener a los perros más cerca. No se ponga a guardar las copas. Utilice la nueva vajilla, no economice su perfume favorito, úselo para pasear contigo mismo, gaste sus tenis favoritos, repita sus ropas favoritas, ¿y qué? Si no está mal, ¿por qué no ahora? ¿Por qué no darse una huida o un viajecito? ¿Por qué no orar en vez de esperar a orar antes de dormir? ¿Por qué no llamar ahora? ¿Por qué no perdonar ahora? Se espera mucho para la Navidad, el viernes, un año más, cuando se tenga dinero, cuando el amor llegue, cuando todo sea perfecto ... Mire.... no existe el todo perfecto. Los seres humanos no pueden lograr esto porque simplemente no se hizo para completarlo aquí. Aquí es una oportunidad de aprendizaje.
Así que tome esta prueba de vida y hacerlo ahora ... ame más, perdone más, abrace más, viva más intensamente y deje el resto en las manos de Dios.

sábado, 20 de abril de 2019

Mensaje del Papa Francisco


Al envejecer, y ser más sabios, lentamente nos damos cuenta de que:
Un reloj de 3000 € marca la misma hora que un reloj de 30 €.

Una cartera de 300 € carga el mismo dinero que una de 30 €.

La soledad en una casa de 70 metros cuadrados o de 300 es la misma.

Espero que un día te des cuenta de que tu felicidad interna no viene de las cosas materiales en el mundo.

No importa si viajas en primera clase o en la económica, igual bajas si el avión se cae.

Espero que te des cuenta de que, cuando tienes amigos y hermanos con quienes hablar, reír, y cantar, eso es verdadera felicidad.

5 hechos indiscutibles de la felicidad:

1 - No eduques a tus hijos para ser ricos, edúcalos para ser felices, para que vean el valor de las cosas y no su precio.

2 - Las palabras más galardonadas en Londres: Come tu comida como si fuera tu medicina, o tendrás que tomar tu medicina como si fuera comida.

3 - La persona que te ama nunca te dejará. Aún si hay 100 motivos para rendirse, encontrarán una razón para quedarse.

4 - Hay una gran diferencia entre un ser humano y ser un humano. Muy pocos la entienden.

5 - Eres amado cuando naces y serás amado cuando mueras.Depende de ti el tiempo intermedio.

Los seis mejores doctores en el mundo:
Luz solar, descanso, ejercicio, dieta, confianza en uno mismo y. amigos.

Mantenlos durante todas las etapas de tu vida y disfruta de una vida sana. "Qué difícil es el ser humano, nacer no pide, vivir no sabe y morir no ¡quiere!   

El MEJOR REGALO que le puedes dar a alguien es tu tiempo y SIEMPRE se le regala a la familia o a un buen amigo. Tómate el tiempo para enviar este mensaje cuando menos a alguien de tu familia o a un buen amigo. ¡CLARO CUANDO TENGAS TIEMPO!

miércoles, 17 de abril de 2019

Más allá del encanto...VALGO - Jorge Luís Borges


De tanto perder aprendí a ganar; de tanto llorar se me dibujó la sonrisa que tengo. Conozco tanto el piso que sólo miro el cielo. Toqué tantas veces fondo que, cada vez que bajo, ya sé que mañana subiré. Me asombro tanto como es el ser humano, que aprendí a ser yo mismo. Tuve que sentir la soledad para aprender a estar conmigo mismo y saber que soy buena compañía. Intenté ayudar tantas veces a los demás, que aprendí a que me pidieran ayuda. Traté siempre de que todo fuese perfecto y comprendí que realmente todo es tan imperfecto como debe ser (incluyéndome). Hago solo lo que debo, de la mejor forma que puedo y los demás que hagan lo que quieran. Vi tantos perros correr sin sentido, que aprendí a ser tortuga y apreciar el recorrido. Aprendí que en esta vida nada es seguro, solo la muerte… por eso disfruto el momento y lo que tengo. Aprendí que nadie me pertenece, y aprendí que estarán conmigo el tiempo que quieran y deban estar, y quien realmente está interesado en mi me lo hará saber a cada momento y contra lo que sea. Que la verdadera amistad si existe, pero no es fácil encontrarla. Que quien te ama te lo demostrará siempre sin necesidad de que se lo pidas. Que ser fiel no es una obligación sino un verdadero placer cuando el amor es el dueño de ti. Eso es vivir…La vida es bella con su ir y venir, con sus sabores y sin sabores… aprendí a vivir y disfrutar cada detalle, aprendí de los errores, pero no vivo pensando en ellos, pues siempre suelen ser un recuerdo amargo que te impide seguir adelante, pues, hay errores irremediables. Las heridas fuertes nunca se borran de tu corazón, pero siempre hay alguien realmente a dispuesto a sanarlas con la ayuda de Dios. Camina de la mano de Dios, todo mejora siempre. Y no te esfuerces demasiado que las mejores cosas de la vida suceden cuando menos te las esperas. No las busques, ellas te buscan. Lo mejor está por venir”

lunes, 15 de abril de 2019

Consejos budistas.


Ámate para amar a los demás
No hay una enseñanza tan sabia como ésta. Mientras no aprendas a estar bien contigo y sentirte bien con lo que eres, nunca podrás estar plenamente con alguien más. Por el contrario, sentirás la necesidad de estar con otras personas para sentirte feliz contigo. “Es mejor la conquista de uno mismo que ganar mil batallas. Así, la victoria será tuya. Ángeles ni demonios, cielo ni infierno te la pueden arrebatar”.

No confundas amor con apego
Es necesario que aprendas que no es indispensable estar con esa persona para amarla y tampoco necesitas atarla para sentirte amado. Una relación sana crea en lugar de destruir, no siente celos ni es egoísta.

Acepta los cambios con sabiduría
Nada se mantiene constante ni estático, lo que distingue a la naturaleza es el cambio y la transformación. Si conoces este principio budista, sabrás que las mutaciones ocurren como un proceso natural; sin ningún tipo de rencor ni odio. Las cosas pasan y te afectan o no, dependiendo de ti.

El sufrimiento es opcional
El sufrimiento siempre remite a la decadencia, pero, en realidad, es un proceso de conocimiento y debería enfrentarse con amor a la vida. La fuerza de voluntad es lo que nos permite mirarlo desde una perspectiva diferente y hacer de él algo opcional.

Perdona siempre
Aquellos que te hicieron daño ya no importan, lo que es fundamental es sentirte bien contigo y hacer de esos momentos algo positivo para ti. Perdonar te permite aprender del malestar y evitar que los momentos que te marcaron se conviertan en sufrimiento.

Todas las derrotas son un aprendizaje
Cada error, si lo sabes sobrellevar, te permite comprender tus fallas y mejorar la siguiente ocación. Las derrotas son lecciones que no debes pasar por alto.

Sólo el amor disipa el odio
Si has quedado resentido con la persona que terminó la relación, a quien haces daño es a ti. “En este mundo el odio nunca ha disipado al odio. Sólo el amor disipa al odio. Esta es la ley, ancestral e inagotable”. No necesitas, ni requieres seguir sufriendo por algo que no puedes cambiar; ama al otro tanto como sea posible y recuerda que sólo así te será fácil perdonar lo que ocurrió.

Libérate de las ataduras
Sólo te limitas tú con tus ideas equivocadas sobre lo que está bien, mal y lo que se debe hacer. Aprendes a disfrutar la vida cuando no deseas nada, gozas más de esta.

Busca la superación
“Con amabilidad supera la ira. Con generosidad supera la mezquindad. Con la verdad supera la decepción”. Siempre busca ser mejor persona y así, aprenderás que tus problemas de desamor se desvanecerán con amor a ti.

sábado, 13 de abril de 2019

Ya sabes pequeños gestos pueden mejorar tu vida.


 "Yo libero a mis padres de la sensación de que han fallado conmigo...
  Yo libero a mis hijos de la necesidad de traer orgullo para mí, que puedan escribir sus propios caminos de acuerdo con sus corazones, que susurran todo el tiempo en sus oídos...
Yo libero a mi pareja de la obligación de completarme. No me falta nada, aprendo con todos los seres todo el tiempo...
Agradezco a mis abuelos y antepasados que se reunieron para que hoy respire la vida...
  Los libero de las fallas del pasado y de los deseos que no cumplieron, conscientes de que hicieron lo mejor que pudieron para resolver sus situaciones dentro de la conciencia que tenían en aquel momento...           
Yo los honro, los amo y reconozco inocentes...
 Yo me desnudo el alma delante de sus ojos, por eso ellos saben que yo no escondo ni debo nada, más que ser fiel a mí mism@ y a mi propia existencia que, caminando con la sabiduría del corazón, soy consciente de que cumplo mi proyecto de vida, libre de lealtades familiares invisibles y visibles que puedan perturbar mi Paz y Felicidad, que son mis únicas responsabilidades.
Yo renuncio al papel de salvador, de ser aquel que une o cumple las expectativas de los demás...
Aprendiendo a través y sólo a través, del AMOR... bendigo mi esencia, mi manera de expresar, aunque alguien no me pueda entender.
Yo me entiendo a mí mism@, porque sólo yo viví y experimenté mi historia; porque me conozco, sé quién soy, lo que siento, lo que hago y por qué lo hago.
Me respeto y me apruebo.
Yo honro la Divinidad en mí y en ti... Somos libres. "


(Antigua bendición Nahuatl, escrita en el siglo VII en la región central de México, que trata de perdón, cariño, desapego y liberación.)

jueves, 11 de abril de 2019

Algo que conocemos, ¿porque no lo hacemos?.


“El batir de las alas de una mariposa puede provocar un huracán en otra parte del mundo” …Con esta simple frase podemos resumir en qué consiste el “efecto mariposa”. Pequeñas acciones pueden ayudar a crear grandes cambios.
Esta idea sacada de la Física y de la” idea del caos” puede aplicarse a la psicología. Las cosas que hagamos hoy influirán en nuestro futuro, que con pequeñas acciones podemos cambiar muchas cosas que no nos gustan de nuestra vida o simplemente que en lugar de culpabilizarnos por los errores que todos cometemos., podemos darle una solución introduciendo pequeños cambios.
Una famosa canción reza “La vida es como una barca un remo lo mueve mi mano y otro remo lo mueve el azar”. ¿Por qué no cogemos nuestro remo con fuerzas y desafiamos al azar?
¿Pero qué podemos hacer por nuestro “efecto mariposa”? Te damos algunas ideas.
1. Habla directamente con las personas en lugar de hacer elucubraciones sobre ese o aquel malentendido.
2. Hazte escuchar. Poco a poco demostrarás a los demás que tienes una personalidad fuerte y no te sentirás ninguneado o maltratado etc.
3. Con tan sólo una sonrisa o unos buenos días crearás un ambiente agradable en torno a ti.
4. Disfruta de pequeños placeres. Una taza de café o chocolate mientras observas como llueve a través de los cristales, observar como duerme un bebé, jugar con los niños o cerrar los ojos y oler y percibir el sonido del mar te proporcionarán una fuente de placer inmediata y que prolongarás en el tiempo. Te irán generando un “pozo de felicidad en tu interior”.
5. Hacer pequeñas cosas por los demás sin esperar nada a cambio. Pequeños gestos como acudir ayudar en campañas contra el hambre, ayudar a tu vecino en un apuro o dejarle el asiento a una abuelita en el autobús, crean efectos mariposa a corto, mediano y largo plazo. Para empezar, está comprobado que el altruismo genera felicidad en las personas, por otro lado, si unimos los pequeños gestos de cada uno generaremos un gran huracán. ¿Te imaginas que cada persona lleva un paquetito de arroz para los más desfavorecidos en la campaña navideña contra la pobreza; se acumularán kilos y kilos de arroz…y todo con un simple gesto; y si todos cedemos nuestro asiento a las abuelas…contribuiremos con el tiempo a generar una sociedad mejor, más humana y más feliz?
6. Detenernos un minuto cuando estamos enfadados, respirar hondo y pensar que somos afortunados por todo lo que tenemos…otro huracán…nuestros niveles de ansiedad bajarán, saldremos de la espiral del enfado y prevenimos sentimientos nada saludables. Gestos como estos previenen dolores de jaqueca, de estómago, resfriados etc. Las enfermedades están muy relacionadas con las emociones y, sino que se lo digan a los romanos y su “Mens Sana in Corpore Sano”.
7. Piensa en el hoy y no en el mañana. Si ahora puedes disfrutar de dar un paseo con tu pareja, hacer un pequeño viaje o reírte en la playa con un amigo y un bocadillo como compañía, hazlo. Volverás a generar un huracán felicidad con estos pequeños gestos…si te vienen malos momentos pensarás lo mucho que te has reído y has disfrutado de la vida en tiempos pasados y te ayudarán a sobrellevar mejor los malos momentos.

martes, 9 de abril de 2019

VIENTRE - Cuento Sufí


"¡El infiel come con sus siete vientres, pero el creyente se contenta con uno solo!" (Hadiz - palabras del profeta.)
Un grupo de infieles llegó un día a la mezquita. Dijeron al profeta:
"¡Oh, tú, que eres generoso con todos! Venimos a pedirte hospitalidad.
Nuestro viaje ha sido largo. ¡Ofrécenos la luz de tu sabiduría!"
El profeta se dirigió entonces a la concurrencia:
"¡Oh, amigos míos! ¡Repartid a estos invitados entre todos vosotros, pues mis atributos deben también ser los vuestros!"
Cada uno de los miembros que rodeaban al profeta se encargó, pues, de un invitado. Sólo quedó uno, un hombre de gran corpulencia. Nadie lo había invitado y permanecía en la mezquita como queda el poso en un vaso de vino.
Fue, pues, el profeta quien se ocupó de él y lo llevó a su morada. Pues bien, el profeta poseía siete cabras que le proporcionaban leche. Tenían la costumbre de acercarse a la casa a la hora de las comidas para ser ordeñadas. El infiel, sin vergüenza, absorbió la leche de las siete cabras, así como todo lo que pudo encontrar como pan y otros alimentos. La familia del profeta se entristeció mucho al ver así devorada la parte de todos. Este hombre extraño, con vientre de timbal, había devorado la comida de dieciocho personas. Cuando llegó la hora de acostarse, el hombre se retiró a su habitación. Una sirvienta, encolerizada con él, lo encerró en ella.
A media noche, el infiel sintió un violento dolor de vientre. Se precipitó hacia la puerta, pero ¡ay! la encontró cerrada, con un cerrojo por fuera. Intentó como un loco abrirla, pero en vano. La presión que habitaba en su vientre le hacía el espacio de la habitación cada vez más estrecho. Como último recurso, volvió a acostarse. En sus sueños, se vio a sí mismo en medio de las ruinas. En efecto, su corazón caía también en ruinas. Esta sensación fue tan fuerte que rompió sus abluciones y ensució su cama.
Al despertar, casi se volvió loco de pesar al ver el desastre. "La tierra entera, se decía, no bastaría para cubrir tal vergüenza. Este sueño ha sido peor que una noche en vela. ¡Lo que como, por un lado, lo hecho por otro para ensuciar! ¿En qué situación me he puesto?"
Como un hombre en el umbral de la tumba, esperó, lamentándose, el amanecer y la apertura de la puerta. Era como una flecha en un arco tenso, listo para huir corriendo de modo que nadie viese su estado. Por la mañana, el profeta vino a abrirle la puerta y después se ocultó tras una cortina por delicadeza. Aunque estaba al corriente del contratiempo de su huésped, no quería mostrarlo, pues eran la sabiduría y la voluntad de Dios las que habían puesto al hombre en aquella situación. Estaba en su destino conocer semejante contratiempo. La animosidad puede engendrar la amistad y los edificios acaban por caer en ruinas.
Un importuno trajo el lecho sucio al profeta y le dijo:
"¡Mira lo que ha hecho tu invitado!"
El profeta respondió sonriendo:
"¡Tráeme una cántara de agua para que yo limpie esto enseguida!
¡Oh, don de Dios! exclamaron entonces sus allegados, ¡que seamos sacrificados por ti...! A nosotros es a los que corresponde ocuparnos de esto. ¡No te preocupes! Este trabajo está hecho para la mano y no para el corazón.
Ponemos nuestra felicidad en ser tus servidores. Si haces tú mismo el servicio, ¿cuál será nuestra utilidad?
-Comprendo, dijo el profeta, ¡pero hay en todo esto una sabiduría oculta!"
Cada uno esperó, pues, la revelación de este secreto. El profeta limpió el lecho de su huésped con un gran cuidado.
Pues bien, el infiel poseía una estatuilla heredada de sus antepasados. En su camino, advirtió de repente que la había perdido. Lleno de angustia, se dijo:
"Seguramente la he olvidado en mi habitación." Le repugnaba volver al lugar de su vergüenza, pero la avidez fue más fuerte y volvió sobre sus pasos. Llegado a la morada del profeta, vio que éste estaba lavando con sus propias manos el lecho sucio. Inmediatamente, olvidó su estatuilla y se lamentó amargamente. Se golpeó el rostro con las dos manos y la cabeza contra la pared, hasta el punto de que su cara se cubrió de sangre. El profeta quiso calmarlo, pero, alertada por sus gritos, acudió la multitud. El hombre se prosternó ante el profeta diciendo:
"¡Oh, quintaesencia del universo! ¡Tú obedeces las órdenes de Dios! ¡Yo, que no soy más que una ínfima parcela, expreso mi vergüenza ante ti!"
A la vista de esta efusión, el profeta lo tomó en sus brazos y lo calmó. Abrió los ojos de su alma.
Si no lloviera, no resplandecería la hierba. Si el niño no llorase, no le darían leche. Se necesita el ojo que llora. No comas excesivamente pues el pan, por su esencia, no hace sino aumentar la sed.
Emocionado por la ternura del profeta, el hombre se despertó como si saliese de un largo sueño. El profeta le roció el rostro con agua y dijo:
"Ven a mí para encontrar la verdad, porque tienes mucho trecho que recorrer en este camino."

sábado, 6 de abril de 2019

SACRIFICIO (Comentario del versículo: "Sacrifica cuatro aves...") - Cuento Sufí


¡Oh, tú! Eres el Abraham de nuestro tiempo. También tú tienes que degollar cuatro aves que, como salteadores, obstaculizan tu camino. Ellas saltan los ojos de los hombres sensatos. Hay en el cuerpo humano cuatro atributos correspondientes a estas aves. Si se sacrifican, se libera el camino del alma.
¡Oh Abraham! Degüéllalas, si quieres que se liberen tus pies. ¡Si deseas resucitar al pueblo y hacerlo eterno, tendrás que degollarlas vivas! Estas aves son el pavo real, el pato, el cuervo y el gallo. Simbolizan cuatro tipos de caracteres.
El gallo representa el deseo carnal, el pavo real la vanidad, el cuervo el deseo de longevidad y el pato la avidez.

jueves, 4 de abril de 2019

SIN NOMBRE - Cuentos para pensar - Jorge Bucay


Un señor muy creyente sentía que estaba cerca de recibir una luz que le iluminara el camino que debía seguir. Todas las noches, al acostarse, le pedía a Dios que le enviara una señal sobre cómo tenía que vivir el resto de su vida.
Así anduvo por la vida, durante dos o tres semanas en un estado semimístico buscando recibir una señal divina.
Hasta que un día, paseando por un bosque, vio a un cervatillo caído, tumbado, herido, que tenía una pierna medio rota. Se quedó mirándolo y de repente vio aparecer a un puma. La situación lo dejó congelado; estaba a punto de ver cómo el puma, aprovechándose de las circunstancias, se comía al cervatillo de un sólo bocado.
Entonces se quedó mirando en silencio, temeroso también de que el puma, no satisfecho con el cervatillo, lo atacara a él. Sorpresivamente, vio al puma acercarse al cervatillo. Entonces ocurrió algo inesperado: en lugar de comérselo, el puma comenzó a lamerle las heridas.
Después se fue y volvió con unas pocas ramas humedecidas y se las acercó al cervatillo con la pata para que éste pudiera beber el agua; y después se fue y trajo un poco de hierba húmeda y se la acercó para que el cervatillo pudiera comer. Increíble.
Al día siguiente, cuando el hombre volvió al lugar, vio que el cervatillo aún estaba allí, y que el puma otra vez llegaba para alimentarlo, lamerle las heridas y darle de beber.
El hombre se dijo:
Esta es la señal que yo estaba buscando, es muy clara. "Dios se ocupa de proveerte de lo que necesites, lo único que no hay que hacer es ser ansioso y desesperado corriendo detrás de las cosas".
Así que agarró su atadito, se puso en la puerta de su casa y se quedó ahí esperando que alguien le trajera de comer y de beber.
Pasaron dos horas, tres, seis, un día, dos días, tres días... pero nadie le daba nada.
Los que pasaban lo miraban y él ponía cara de pobrecito imitando al
cervatillo herido, pero no le daban nada.
Hasta que un día pasó un señor muy sabio que había en el pueblo y el pobre hombre, que estaba muy angustiado, le dijo:
- Dios me engañó, me mandó una señal equivocada para hacerme creer que las cosas eran de una manera y eran de otra. ¿Por qué me hizo esto? Yo soy un hombre creyente...
Y le contó lo que había visto en el bosque.
El sabio lo escuchó y luego dijo:
- Quiero que sepas algo. Yo también soy un hombre muy creyente.
Dios no manda señales en vano. Dios te mandó esa señal para que aprendieras.
El hombre le preguntó: ¿Por qué me abandonó?
Entonces el sabio le respondió:
- ¿Qué haces tú, que eres un puma fuerte y listo para luchar, comparándote con el cervatillo?
Tu lugar es buscar algún cervatillo a quien ayudar, encontrar a alguien
que no pueda valerse por sus propios medios.

martes, 2 de abril de 2019

UN LUGAR EN EL BOSQUE - Cuentos para pensar - Jorge Bucay


Esta historia nos cuenta de un famoso rabino jasídico: Baal Shem Tov.
Baal Shem Tov era conocido dentro de su comunidad porque todos decían que él era un hombre tan piadoso, tan bondadoso, tan casto y tan puro que Dios escuchaba sus palabras cuando él hablaba.
Se había hecho una tradición en este pueblo:
Todos los que tenían un deseo insatisfecho o necesitaba algo que no habíapodido conseguir iban a ver al rabino.
 Baal Shem Tov se reunía con ellos una vez por año, en un día especial que él elegía. Y los llevaba a todos juntos a un lugar único, que él conocía, en medio del bosque. Y una vez allí, cuenta la leyenda, que Baal Shem Tov armaba con ramas y hojas un fuego de una manera muy particular y muy hermosa, y entonaba después una oración en voz muy baja... como si fuera para él mismo.
Y dicen... que Dios le gustaban tanto esas palabras que Baal Shem Tov decía, se fascinaba tanto con el fuego armado de esa manera, quería tanto a esa reunión de gente en ese lugar del bosque... que no podía resistir el pedido de Baal Shem Tov y concedía los deseos de todas las personas que ahí estaban.
Cuando el rabino murió, la gente se dio cuenta de que nadie sabía las palabras que Baal Shem Tov decía cuando iban todos juntos a pedir algo...
Pero conocían el lugar en el bosque. Sabían cómo armar el fuego.
Una vez al año, siguiendo la tradición de Baal Shem Tov había instituido, todos los que tenían necesidades y deseos insatisfechos se reunían en ese mismo lugar en el bosque, prendían el fuego de la manera en que habían aprendido del viejo rabino, y como no conocían las palabras cantaban cualquier canción o recitaban un salmo, o sólo se miraban y hablaban de cualquier cosa en ese mismo lugar alrededor del fuego.
Y dicen... que Dios gustaba tanto del fuego encendido, gustaba tanto de ese lugar en el bosque y de esa gente reunida... que, aunque nadie decía las palabras adecuadas, igual concedía los deseos a todos los que ahí estaban.
El tiempo ha pasado y de generación en generación la sabiduría se ha ido perdiendo...
Y aquí estamos nosotros.
Nosotros no sabemos cuál es el lugar en el bosque.
No sabemos cuáles son las palabras.
Ni siquiera sabemos cómo encender el fuego a la manera que Baal Shem Tov lo hacía...
Sin embargo, hay algo que sí sabemos:
Sabemos esta historia,
Sabemos este cuento...
Y dicen...
que Dios adora tanto este cuento...
que le gusta tanto esta historia...
que basta que alguien la cuente...
y que alguien la escuche...
para que Él, complacido, satisfaga cualquier necesidad
y conceda cualquier deseo a todos los que están compartiendo este momento...
Amén... (Así sea...)
EL MAESTRO SUFI
El Maestro sufí contaba siempre una parábola al finalizar cada clase, pero los alumnos no siempre entendían el sentido de la misma...
- Maestro – lo encaró uno de ellos una tarde. Tú nos cuentas los cuentos
pero no nos explicas su significado...
- Pido perdón por eso. – Se disculpó el maestro – Permíteme que en señal
de reparación te convide con un rico durazno.
- Gracias maestro. - respondió halagado el discípulo
- Quisiera, para agasajarte, pelarte tu durazno yo mismo. ¿Me permites?
- Sí. Muchas gracias – dijo el discípulo.
- ¿Te gustaría que, ya que tengo en mi mano un cuchillo, te lo corte en
trozos para que te sea más cómodo?...
- Me encantaría... Pero no quisiera abusar de tu hospitalidad, maestro...
- No es un abuso si yo te lo ofrezco. Solo deseo complacerte...
- Permíteme que te lo mastique antes de dártelo...
- No maestro. ¡No me gustaría que hicieras eso! Se quejó, sorprendido el
discípulo.
El maestro hizo una pausa y dijo:
- Si yo les explicara el sentido de cada cuento... sería como darles a
comer una fruta masticada.