jueves, 30 de mayo de 2024

Para reflexionar…

La naturaleza colabora con el karma y lo lleva a cabo como la mano amorosa de la Justicia Divina al entrar en acción: Terremotos, volcanes, maremotos, vientos huracanados, etc, son como el fuego devorador que consume lo indeseable, limpia y purifica.

Se trata de una fuerza muy beneficiosa que ha sido calificada como destructiva y no lo es.

El fuerte y poderoso debe apoyo y protección al débil; el que abusa de su fuerza y poderío para oprimir a su semejante, viola la Ley de Dios. Los espíritus anuncian que los tiempos designados por la Providencia para una manifestación universal han llegado ya.

Ocúpate con celo y perseverancia de la labor espiritual que has emprendido con el concurso de las Altas Inteligencias porque esa labor es de ellos. No te acobardes con la crítica. Encontrarás impugnadores encarnizados, sobre todo en las gentes interesadas en conservar los abusos.

Es el tiempo de la verdad surgiendo por todas partes y la vanidad de los descubiertos tratará por todos los medios de continuar manipulando. La vanidad de ciertos hombres con millones de seguidores que creen saberlo todo, quieren explicar a su modo las cosas.

Los seguidores de Jesús se confundirán en el mismo sentimiento de amor y bien, se unirán en un lazo fraternal. Las personas de bien dejarán a un lado las cuestiones miserables de las palabras para ocuparse de las cosas esenciales, el fondo de las cosas. Experimentar el placer de ver propagarse el bien por toda la Tierra será el único fin de la humanidad que despierta de la “larga noche de los tiempos”.

Acuérdate que los espíritus buenos no asisten más que a los que sirven a Dios con humildad y desinterés. El orgullo y la ambición serán siempre una barrera entre el hombre y Dios; son un velo corrido ante los celestiales destellos, y Dios no puede servirse de los ciegos para dar a comprender la luz.

Fuente: yosoylarevoluciondelcristo.blogspot.com

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