jueves, 30 de mayo de 2024

Para reflexionar…

La naturaleza colabora con el karma y lo lleva a cabo como la mano amorosa de la Justicia Divina al entrar en acción: Terremotos, volcanes, maremotos, vientos huracanados, etc, son como el fuego devorador que consume lo indeseable, limpia y purifica.

Se trata de una fuerza muy beneficiosa que ha sido calificada como destructiva y no lo es.

El fuerte y poderoso debe apoyo y protección al débil; el que abusa de su fuerza y poderío para oprimir a su semejante, viola la Ley de Dios. Los espíritus anuncian que los tiempos designados por la Providencia para una manifestación universal han llegado ya.

Ocúpate con celo y perseverancia de la labor espiritual que has emprendido con el concurso de las Altas Inteligencias porque esa labor es de ellos. No te acobardes con la crítica. Encontrarás impugnadores encarnizados, sobre todo en las gentes interesadas en conservar los abusos.

Es el tiempo de la verdad surgiendo por todas partes y la vanidad de los descubiertos tratará por todos los medios de continuar manipulando. La vanidad de ciertos hombres con millones de seguidores que creen saberlo todo, quieren explicar a su modo las cosas.

Los seguidores de Jesús se confundirán en el mismo sentimiento de amor y bien, se unirán en un lazo fraternal. Las personas de bien dejarán a un lado las cuestiones miserables de las palabras para ocuparse de las cosas esenciales, el fondo de las cosas. Experimentar el placer de ver propagarse el bien por toda la Tierra será el único fin de la humanidad que despierta de la “larga noche de los tiempos”.

Acuérdate que los espíritus buenos no asisten más que a los que sirven a Dios con humildad y desinterés. El orgullo y la ambición serán siempre una barrera entre el hombre y Dios; son un velo corrido ante los celestiales destellos, y Dios no puede servirse de los ciegos para dar a comprender la luz.

Fuente: yosoylarevoluciondelcristo.blogspot.com

martes, 28 de mayo de 2024

12 señales de que podrías haber encontrado a tu Alma Gemela.

Muchos se han preguntado alguna vez cuál es su alma gemela o como encontrarla y saber si es o no su alma gemela.

Espiritualmente hablando, se dice que aún antes de nacer, el nombre de tu mitad espiritual es determinado. Cada alma tiene su complemento: su alma gemela.

A pesar de que mucha gente piensa que el alma gemela es una armoniosa unión de felicidad, se supone que tu verdadera alma gemela es la persona destinada a “completarte”.

Jerry Maguire tenía razón: las almas gemelas te completan. Una persona es incapaz de completar su misión en la vida, por sí sola. Todos necesitamos a alguien que nos ayude a convertirnos en una mejor persona. Y no siempre es una experiencia agradable.

Menciona la palabra “alma gemela” a un grupo de personas y verás como muchos ponen los ojos en blanco. La idea de que hay una persona mágica para ti de la que te enamorarás al instante y con la que nunca discreparás, simplemente no es realista.

Lo que sí existe – al menos para mucha gente – es una persona que conoces instintivamente, con la que te conectas al nivel más profundo, y que te permite crecer como persona en la relación. Cuando esa persona es una pareja romántica, ya has encontrado algo verdaderamente especial.

Entonces, ¿cómo sabes cuándo la has encontrado? A continuación, un equipo de expertos de amor y de relaciones identifican los signos más reveladores.

1.- Se comunican sin hablar.

Las almas gemelas pueden leerse el uno al otro como un libro abierto. “Se conectan con fervor en todos los niveles del ser”, dijo la Dra. Carmen Harra, psicóloga clínica y experta en relaciones. “Uno puede terminar las frases del otro, pueden coger el teléfono para llamar a los demás al mismo tiempo, o se sienten como que simplemente no pueden estar sin su pareja.”

El Dr. Sue Johnson, un psicólogo clínico y autor de Love Sense, dijo que un alma gemela también sabe cómo responder a tus señales emocionales. “Se quedan cerca cuando confías, te dan toda su atención y se mueven para responder a tus necesidades, tocan tu mano cuando estás un poco inseguro, te abrazan cuando estás contento, y te reconfortan con ternura que cuando estás sufriendo”, añadió.

2.- Sabes en tu interior que has encontrado al elegido.

El viejo dicho “Cuando lo sabes, lo sabes” suena a verdad cuando se trata de una conexión de alma gemela. “Realmente no hay adivinanzas o preguntas cuando el verdadero llega,” dijo el oficiado de bodas y autor Rev. Laurie Sue Brockway. “Por lo general, hay signo revelador que te permite saber cuándo el verdadero amor ha llegado – una voz en tu cabeza, una sensación de reconocimiento o una corazonada de que se trata de alguien especial para ti.”

3.- La química física es palpable

Y la electricidad que se siente no sólo sucede en un nivel sexual. “Tomar de la mano a tu alma gemela lanza tu espíritu en un torbellino, incluso después de muchos años en la relación”, dijo Harra.

4.- Han estado totalmente cómodos el uno con el otro desde el primer día.

Las almas gemelas se conectan con facilidad y se muestran completamente sin temor al juicio. “Las almas gemelas a menudo sienten un sentido de lo familiar y una sensación de comodidad alrededor de la otra persona”, dijo Brockway. “Mucha gente dice que es más fácil relajarse con esa persona y permitirse ser vulnerable.”

“Es el que se abre a ti – que te deja entrar, para que puedas verlo”, añadió Johnson. “Este es el tipo de persona que toma riesgos y comparte su mundo interior, sus emociones y sus necesidades.”

5.- Pero la relación no es todos arco iris y mariposas. Él o ella te reta como nadie más puede hacerlo.

La relación de alma gemela, a pesar de lo que la gente podría suponer, no va siempre viento en popa. “Un alma gemela no siempre está envuelto en un paquete perfecto, físicamente o en términos de circunstancias de la vida – ni tampoco significa que la relación va a venir sin desafío”, dijo el autor Kailen Rosenberg de la firma de casamentera The Love Architects. “Sin embargo, la diferencia es que las circunstancias de la vida y los retos difíciles son una fuente de fortalecimiento que se convierte en el pegamento que los mantiene unidos a través de los tiempos difíciles y ayuda a cada uno a convertirse en su yo más auténtico.”

Lo que, es más, nos apoyamos en nuestras almas gemelas para ayudarnos a evolucionar como personas. “Puedes encontrar una relación de alma gemela que sea rocosa, y que tu pareja sea una persona que te saca de tus casillas y que te exaspera al principio porque trae con ella algunas de las lecciones más difíciles para el alma”, dijo Brockway.

6.- Puede que no tengan una visión común de cada cosa pequeña, pero están en la misma página donde realmente importa.

“Una relación de alma gemela no significa necesariamente que la pareja siempre comparta los mismos puntos de vista, sino que sus metas y ambiciones globales calcen”, dijo Harra. “Muchas opiniones diminutas serán diferentes, pero las almas gemelas en general tienen las mismas virtudes y valores, y ven el mundo a través de un lente similar.”

7.- La relación trae a ambos una sensación de calma interior.

Es obvio cuando estás con la persona equivocada; estás inseguro acerca de la relación y te preocupa que un movimiento en falso hará que tu pareja se vaya. Ese no es el caso de las almas gemelas.

“Te sientes seguro de que tu pareja estará contigo en el largo plazo”, dijo el experto en citas Tracey Steinberg, autor de “Flirt For Fun & Meet The One”. “No importa lo que pase en sus vidas, ambos están de acuerdo en que son compañeros de equipo y pasarán por eso juntos.” Y continuó: “Tu voz interior te dice que estás en una relación sana. Confían el uno en el otro, se sienten seguros y cómodos con el otro y se sienten seguros discutiendo temas difíciles de una manera madura.”

8.- Tú y tu pareja tienen identidades separadas, pero se enfrentan al mundo como uno sólo.

“Las almas gemelas reconocen que son dos partes de un mismo todo, y ninguna influencia externa puede romper ese vínculo”, dijo Harra

9.- Es posible que se hayan conocido durante años, pero de repente se encontraron listos para el amor al mismo tiempo.

Cuando se trata de amor verdadero, el momento lo es todo. “He casado a tantas parejas que se conocieron en la escuela secundaria o en sus veinte años, quizás salieron, terminaron, siguieron adelante, o se juntaban con el mismo círculo de amigos y nunca conectaron,” dijo Brockway. “Entonces, un día, se encuentran otra vez, a veces en formas mágicas, y el amor florece.” Mantén una mente abierta y un corazón abierto para que cuando tu alma gemela llame a tu puerta, estés listo para abrirla.

10.-  Sienten el dolor de la otra persona

Tienen empatía. Se paran en los zapatos de la otra persona. Se conocen tan bien, que en el segundo en que tu pareja entra por la puerta, puedes saber cómo estuvo su día. Sientes lo que tu pareja siente: tristeza, preocupación, estrés. Y comparten la felicidad y la alegría.

11.- Comparten las mismas metas en la vida

Cuando ambos están en la misma página, compartiendo valores, ética y metas. Puede ser que tengan enfoques distintos de cómo alcanzar las metas, pero ambos quieren el mismo resultado.

12.- Han cruzado caminos antes

A veces las almas gemelas se han conocido en un período anterior. Puede ser que no se conectaron, pero estuvieron en el mismo lugar y en la misma época. (No estamos hablando de vidas anteriores, sino que quizás eran vecinos, pero nunca se conocieron hasta que el tiempo era el indicado).

Fuente: caminantedelasgalaxias.blogspot.com

sábado, 25 de mayo de 2024

Aprende a vivir en la alegría.

La alegría de vivir es la luz que llega de la vida y te invita a cada instante a expresarte profundamente desde tu ser.

La vida te acompaña cada día, te inunda con sus energías, sus partículas, sus aromas, sus colores, te convidan a sentir alegría y experimentar en tu vida todo aquello que deseas aprender.

El camino de la evolución es crecer y crecer, el camino de la vida es vivir con alegría y sentir a cada ser.

Siente profundamente tu alma y como la vida te invita y como el universo te convoca a experimentar el amor en tu ser. El amor es la vida, la vida es el amor y en cada ser humano todos vibran la luz eterna que Dios creó.

Toda la naturaleza constantemente crea, tu ser te invita a crear y la naturaleza con sus energías y aromas te hace sentir el impulso de la belleza que también en ti tiene que crear.

Siente esa alegría, siente esa vida ábrete a disfrutarla porque es del divino, como Dios se comunica, como su energía te impulsa en tu interior, como la llama te invita a ser un cocreador.

Todos los seres humanos que están aquí en la tierra están para crearse a sí mismos, para conocer las leyes divinas y aprender a vivir en armonía con la vida. La vida ella es el alma, el espíritu de la tierra y los colores son sus emociones que a todos comunica, que a todos transmite, que a todos da alegría.

Dios se comunica contigo a través de la alegría y cuando un ser humano siente la alegría de otro ser humano, cuando un ser humano entra en sintonía con la alegría, en ese momento Dios se expresa en tu propia alegría, ¿Qué es la alegría sino la expansión del corazón? ¿Qué es la alegría sino captar la belleza a tu alrededor?,

¿Qué es la alegría sino sintonizarte con los demás en tu corazón? ¿Qué es la alegría sino la música de la oración? ¿Qué es la alegría sino aprender a danzar en armonía con la vida?

Cuando una persona está alegre a todos transmite esa alegría, a todos despierta la emoción de su alma, a todos les estimula a buscar y compartir la felicidad de su corazón.

Solamente existe felicidad profundamente en la alegría y cuando los seres humanos se sienten en su interior y no desprenden su energía entonces viene la tristeza, viene la depresión, viene el bloqueo interior.

Aprende a vivir en la alegría, a sentir la alegría que la vida te transmite, a comunicarla a cada ser humano y a multiplicar la emoción. El artista se emociona por los colores de la naturaleza, el artista se emociona al sentir a cada ser humano, se emociona en las formas que se mueven, que se expresan de acuerdo a sus leyes, de acuerdo a su movimiento, según la vida y la creación.

Sentir la alegría es abrirte a algo nuevo, sentir la alegría es despertar y comunicar lo mejor de tu ser, sentir la alegría es sentir que Dios te invita a vivir como un ser humano pleno y feliz.

Todos los seres humanos vienen a ser felices todos los seres humanos están aquí para vivir su corazón, todos los seres humanos buscan profundamente el amor, todos los seres humanos quieren ser felices, pero ¿dónde buscan esa felicidad?, ¿dónde ponen su corazón?, ¿dónde ponen sus metas?, ¿dónde buscan esa experiencia interior?

Tus metas son los deseos que modelan tu alma, tus emociones son los sentimientos que vibran en tu interior. Tus ideas son las metas que crean en tu interior las energías que atraen las experiencias para tu propia evolución.

La ley te dice crece respetando a cada ser, ama a cada ser como a ti, vibra en la unión de corazón y entonces sentirás que a través de cada ser humano se comunica Dios.

Es la luz de la armonía, es el respeto y la paz interior, es la unión y la comprensión las que hacen que tu corazón se abra, se expanda y sienta a cada corazón.

Cuando un ser humano siente a otro corazón en su ser a comprendido profundamente el misterio del ser donde la luz vive en todos y el amor también; donde la vida les sostiene porque todos forman parte del cuerpo divino de la creación.

Seres vivientes, seres inteligentes cocreadores que caminan todos queriendo buscar la felicidad en la vida.

Todos los seres humanos pueden ser felices si son capaces de encontrar en su corazón. Si un ser humano es capaz de buscar y encontrar en su corazón, en el silencio, en la paz, en la armonía, sentirá a cada corazón, porque cuando un ser entra en el silencio y en la armonía en ese momento en el brillan los ideales, el amor, la vida, la energía, la vibración.

Libérate de todo sufrimiento, libérate de todo resentimiento, libérate de toda confusión, conocerte a ti mismo y conocerás que en ti está el creador.

Conoce el amor en cada ser humano y descubrirás la forma en como Dios también quiere buscar el amor.

Busca el amor en cada ser humano y descubrirás la forma en como Dios quiere amarte de corazón.

El amor es la sintonía, el amor es la luz, el amor es el cariño, el amor es el respeto, el amor es sentir profundamente a cada ser respetando su camino,

comprendiendo su personalidad y sintonizándote con lo mejor de su ser que te permite crecer en él, Él el creador, Él la vida, Él el ángel de la tierra, Él el Cristo, Él la luz divina que brilla en todas las conciencias en todos los ángeles en todos los maestros, Él es Dios presente en ti, pulsando en ti las notas musicales de cómo las estrellas crean la armonía, los planetas, la geometría, la música donde todos participáis en un mundo que estáis creando desde vuestro propio corazón.

Este mundo es vuestra propia creación, la humanidad evoluciona y se transforma, llega a mejorar sus formas, su cultura, su religión, su filosofía comprendiendo su propia esencia, comprendiendo los misterios de la vida y de su evolución, encontrando y buscando profundamente la felicidad del corazón donde el amor se manifiesta como la unión profunda del ser en Dios.

Cuando un ser humano renuncia a su personalidad, renuncia a sus caprichos, a su orgullo a su soberbia y es capaz de comunicarse con otro ser humano de corazón abierto, con respeto, con humildad queriendo dar lo mejor de su ser, en ese momento la luz divina, la llama y la fuente de la tierra, la llama trina, la llama del amor en él se comunica transmitiendo su alegría, su paz, su silencio y la certeza de que él es un hijo de Dios, es un cocreador, es un ser de luz.

Antonio Cerdan. Tomado de: shekinahmerkaba.ning.com

jueves, 23 de mayo de 2024

El número de hermano que eres dice mucho de ti.

Dentro de la dinámica familiar, el orden en el que nacen los hijos es importante, para la personalidad y para la afinidad con los demás. Por eso te interesa saber qué número de hermano eres. Marc Fréchet, el descubridor de los “Ciclos Biológicos Memorizados”, descubrió también que existían patrones repetidos en las personalidades de los primogénitos, de los segundos hijos y de los hijos terceros.

Hay una especie de “resonancia”, afinidad. Y es, básicamente, una regla de 3. Es decir, no existe el 4, la afinidad y personalidad de los hijos 4, es la del hijo 1, porque vuelve a comenzar.

Este principio está cimentado en la subconsciente idea de la “Trinidad”.

1: Es masculino, el hombre.
2: Es femenino, la mujer.
3: Es la realización, la creatividad, el fruto.

Afinidades entre hijos:
Hijo 1, afín al hijo 4, al hijo 7 y al hijo 10
Hijo 2, afín al hijo 5, al hijo 8 y al hijo 11
Hijo 3, afín al hijo 6, al hijo 9 y al hijo 12

Y la misma memoria subconsciente, existe en el vientre de una madre. Todas las concepciones, así sean abortos naturales y provocados, corresponden a los números descritos: masculino, femenino y realización.

Y éste número en la hermandad, representa que hay simpatía, entendimiento, comprensión, complicidad y en algunos casos, hasta parecido físico.

En todas las familias sucede esto y puede ocurrirte con tus hermanos y con tus padres. Por ejemplo, si tú eres el primero hijo y tu padre es el primer hijo dentro de su familia, tú y tu padre serán afines.

Si tú eres el hijo 2 y tu madre es la segunda hija en su familia, serás afín a tu madre.

En Biodescodificación, éste llamado “Rango de Hermandad”, influye también en lo que decidas hacer en la vida, porque como parte de la “afinidad”, resulta el copiar, el imitar, el repetir programas, enfermedades, etc.

Existiendo a la vez, la influencia del proyecto sentido con el que te conciban tus padres. Es decir, si te sienten un gran regalo, un estorbo, un bebé ya no esperado ni deseado, un accidente, etc.

Y en general, se han podido observar las siguientes características, en la personalidad de los hijos, según qué número de hermano eres o ciertas condiciones específicas:

El primer hijo, el primogénito.

Disfrutan durante algunos meses o años, de ser hijos únicos, pero con el nacimiento de los hermanos viven un conflicto de pérdida, porque ya no toda la atención de los padres se dirige a ellos. Más cuidados van al hermano.

El primogénito, puede reaccionar aislándose, convirtiéndose rápidamente en un ser independiente o puede convertirse en enemigo del hermano 2. Esto dependerá mucho de la capacidad de los padres para educarlos en equilibrio.

El primogénito suele ser un hijo responsable, ordenado, esquemático, líder y por lo general, extremadamente seguro de sí mismo. Se sabe especial, se sabe importante y se sabe fuerte. Será la voz que escuchen todos los demás hermanos.

Con frecuencia se les obliga a cumplir responsabilidades que les corresponderían a los padres: cocinar, cuidar a los hermanos, resolver problemas de la casa, alimentar a los hermanos, e incluso a mantener el negocio familiar en algunos casos.

Ser primogénito también tiene sus ventajas. Por lo general, el primero hijo representa el linaje del padre, de la familia paterna e incluso, en un gran porcentaje de ocasiones “el parecido físico mayor” es con el padre.

Hay que tener cuidado, de no cargar la mano al hijo primogénito, porque puede sentirse obligado a ver de por vida por los hermanos, mantenerlos, cuidarlos y dejar su vida de lado. Las hijas primogénitas, con frecuencia llegan a tener un gran poder en la familia y asumen responsabilidades como el rol de cuidadoras, pudiendo llegar a convertirse en madres simbólicas de los hermanos y de la propia madre.

Los hijos primogénitos varones se convierten en patriarcas, en guías para toda la familia. Todos le siguen y obedecen. Tiene muy marcados los valores masculinos de la familia. Y hay que analizar al padre, al abuelo y al bisabuelo, para entender toda la carga emocional que trae encima.

Son muy sensibles a los problemas del linaje paterno y a los programas inconscientes de otros familiares primogénitos en el árbol.

Si hay un primogénito que tenga padre ausente, familia paterna no presente, que haya sufrido abandono del padre, entonces, será un hijo rehén de secretos y sombras transgeneracionales. Con una gran carga emocional negativa.

Un primogénito hombre o mujer, nunca rechazarán asumir responsabilidades y buscar el liderazgo, pudiendo llegar a creerse irreemplazables. Se identificarán con personas que están en posición de poder. Pueden tener actitudes autoritarias y un marcado interés por los bienes materiales.

Son pragmáticos y ordenados. Los fracasos no les desaniman.

Con sus parejas se mostrarán sensibles y tímidos.

No sólo las tratarán como a un “igual” sino que buscarán parejas fuertes, decididas, determinadas.

Los primogénitos, hombres y mujeres, serán padres controladores y estrictos.

El primogénito varón, seguido de una hermana.

El primogénito varón seguido de una hermana tiene un don natural para cuidar a las mujeres, con las que sabe mostrarse atento y comprensivo. Elegirá mejor que otros hombres a sus parejas y no tendrá inconvenientes en trabajar con o para ellas.

La primogénita mujer, seguida de una hermana.

La primogénita mujer, seguida de una hermana toma actitudes maternales con ella. Tiende a ser responsable, estricta y preocuparse por los demás, dando órdenes y controlando.

Cuando llega el momento, intentará controlar a su marido y a sus hijos. Son mujeres muy sacrificadas, que llegan a olvidarse de sí mismas.

Suelen tener una relación muy estrecha con el padre, siéndole fiel. Puede sentir culpa inconsciente por ser la preferida del padre. Por su rol matriarcal, puede tener dificultades para entenderse con el sexo opuesto. De hecho, le molesta que el hombre que le interesa busque su contacto. Su pareja ideal sería un hermano menor de hermanas o un hombre con el mismo rango de hermandad que su padre.

El primogénito varón, seguido de un hermano.

El primogénito varón, seguido de un hermano, se convierte en guía de éste, pero suele ser una relación difícil, Casi siempre se convierten en enemigos. Piensan diferente, actúan diferente, sienten diferente. Se crea una especie de competencia de por vida, para ser mejor que el otro.

La primogénita mujer, seguida de un hermano.

La hija primogénita seguida de un hermano varón, tendrá una fascinación especial por el mundo masculino y una conexión especial con la abuela paterna y las tías paternas.

Sabe cuidar de los hombres y será muy valorada por ellos, sobre todo si son hermanos menores. En cambio, puede tener conflictos de poder con hombres primogénitos, porque los verá como competencia y será una lucha constante de poder.

Será independiente y fuerte, en el ámbito profesional prefiere dirigir. Tendrá una mejor relación con el sexo masculino que con el femenino.

A los hombres bajo su cargo, los tratará como niños.

En las relaciones de pareja, suele esforzarse por satisfacer a su hombre, olvidándose de sí misma y de sus necesidades.

El segundo hijo, el hijo sándwich.

La confusión.

Se trata, sin duda, del hijo cuyo rango de hermandad entraña más dificultades en el seno familiar. Disfrutará de una mayor neutralidad y su posición favorecerá un mayor equilibrio emocional; pero dudará consciente e inconscientemente de los sentimientos de los padres hacia él en comparación con el resto de hermanos. No tendrá más opción que esforzarse para hacerse notar y reclamar protagonismo.

Su equilibrio emocional le llevará a ser probablemente comprensivo, cooperativo y flexible sin dejar, por ello, de ser competitivo. Suele rodearse de un círculo de amistades en el que buscará la atención que siente que no obtuvo en la familia. Al haber recibido menor atención que sus hermanos por parte de los padres, las amistades pueden convertirse en una suerte de familia de compensación.Precisamente, esta habilidad social aprendida por la necesidad puede propiciar actitudes emprendedoras exitosas.

Por otra parte, fruto de la comparación con hermanos mayores y menores, así como del reclamo de protagonismo, el hijo de rango central forjará una personalidad opuesta al hermano mayor y al hermano menor.

Hijo segundo varón, si el primogénito es varón.

Si el segundo hijo es varón y ha nacido poco tiempo después de un primogénito varón, puede acentuarse ese espíritu competitivo e incrementarse la polarización con las cualidades del mayor por oposición. Si uno de los progenitores es también hermano segundo, se identificará con él; si se trata del padre, esa identificación padre segundo – hijo segundo generará competencia de este último con el primogénito.

Como resultado y reminiscencia de sus dudas de la niñez sobre el cariño y los sentimientos de los padres, en la vida buscará amigos protectores que lo entiendan y valoren.

Profesionalmente, no tendrá inconvenientes en ser subordinado, aunque puede desafiar a oponentes más poderosos. Con las mujeres se mostrará generoso y permisivo.

Hijo segundo varón, si el primogénito es mujer.

Será un hijo aislado, que luchará por ser el mejor, ser independiente, y puede tener una personalidad muy femenina o emocional o lo contrario, una personalidad dura y rígida.

Necesitará mucho el referente paterno. Copiar al padre, imitar a su padre. Comprender cómo debe ser un hombre.

Las mujeres no sólo lo aman, sino que anhelan cuidarlo. En cuanto a las mujeres, puede seducirlas fácilmente. Siempre esperará que las mujeres de su vida, primero hermanas y luego parejas, lo protejan y sirvan. Para él sólo cuentan sus propios intereses.

Hija segunda mujer, si el primogénito es hombre.

Será femenina, cálida, amable y sensible. Obviamente, con esas cualidades puede conseguir lo que quiera de los hombres y, de hecho, tiene gran facilidad para encontrar compañía. Suele casarse o emparejarse antes que las demás, aunque no le preocupa la soltería porque tiene hermanos en quien apoyarse. Su mejor elección como pareja será un hermano mayor de hermanas. Es capaz de adaptar su vida a los intereses del hombre que ama.

Hija segunda mujer, si el primogénito es mujer.

Vivirá buscando el reconocimiento de los demás y se mostrará competitiva no sólo con otras mujeres sino también con los hombres. Necesita sentirse respetada. Se identifica con su madre y con su abuela materna, sobre todo si tienen su mismo rango de hermandad. También necesitará al esposo que deberá implicarse en lo cotidiano con los hijos y ayudarla mucho con ellos.

En cuanto a los hijos, le cuesta manejarlos, no se sabe dar a respetar, siente que su voz, no cuenta y precisa la ayuda de su madre o de la hermana. Suelen ser madres de hijos muy conflictivos, porque jamás las ven como autoridad.

El tercer hijo, el chiquito, el benjamín.

Llega cuando los padres ya tienen confianza y experiencia acumulada para ejercer ese rol.

El hijo pequeño goza, por tanto, de más permisividad y menos control que sus hermanos mayores. Por ende, desarrolla cualidades como la simpatía y el encanto para poder seducir, con lo que acapara las atenciones de todos los miembros de la familia y también las envidias de sus hermanos. Al gozar de más libertad, el hijo menor es más independiente.

Tiene mucho en común con el primogénito porque ambos se sienten con derechos y se creen especiales. Como hijo menor, ha tenido que afrontar menos responsabilidades y en la vida probablemente no buscará experiencias con mucha responsabilidad.

Puede estar sobreprotegido y, como resultado, mostrarse menos respetuoso con la autoridad.

El hijo menor puede heredar programas inconscientes muy concretos, como las tentativas de sus padres para que no abandone el hogar familiar (síndrome del nido vacío) o representar el programa inconsciente de ser el cónyuge ideal del progenitor del sexo contrario.

Puede sentirse el hijo bastón y padecer sobrepeso por sentir que debe ser “grande y fuerte”, para cargar con la madre o el padre en la vejez. Difícilmente hará su vida sin salirse de la casa.

Difícilmente se casará o pensará en hacerlo mientras sus padres vivan.

Cuando le separan varios años de sus hermanos anteriores, su rol es muy similar al del hijo único.

Hijos Únicos.

Crecen rodeados de adultos, por lo que adquieren rápidamente la madurez. Normalmente, se benefician de recursos como tiempo, atención y dinero. Además, no tienen que compartir ni competir por el amor de sus padres. Esto acrecienta su tendencia a ser independientes. Al pasar tanto tiempo solos, suelen ser ingeniosos y creativos.

Desde un punto de vista estrictamente transgeneracional, los hijos únicos a veces responden a memorias de conflictos entre hermanos de anteriores generaciones y son la respuesta al deseo de estar solos y evitar la repetición de esos enfrentamientos. Otras veces, se trata de la reparación de un exceso de hijos o de una procreación caótica en generaciones anteriores.

El hijo único es el depositario de las expectativas de sus padres. Además, tiene que asumir todo el peso de la continuidad familiar. El clan corre peligro de extinguirse, lo que se traduce en una carga adicional para él. Es frecuente que en estos casos se manifieste el Complejo de Atlas al tener que sostener en soledad sobre sus hombros toda la herencia transgeneracional y la responsabilidad de la supervivencia del clan.

Echará de menos la existencia de hermanos y se sentirá culpable inconscientemente si la madre ha sufrido abortos.

En el caso del hijo único varón, hay que tener muy en cuenta el linaje paterno y los rangos de hermandad de su padre y su abuelo. Un padre que sea hermano mayor de hermanos se llevará bien con su hijo único.

El hijo único varón puede asumir roles de liderazgo, aunque preferirá asesorar más que mandar él mismo. Como pareja, buscará una que sea maternal y acepte subordinarse a él y a sus intereses. Se identificará especialmente con otro hijo único o con hermanos mayores. Si tiene un hijo, preferirá que sea varón.

A la hija única le cuesta compartir más que a otras mujeres. Intentará ser siempre la preferida y no pasar nunca inadvertida. Habitualmente, es incapaz de dejar de lado su egocéntrica personalidad en relación a los hombres, de los que espera que representen un modelo paterno. Su madre la asiste más que otras madres a sus hijas y es posible que hasta le busque parejas. El hombre que se case con ella debe tener muy en cuenta a la madre de ella ya que, por lo general, la suegra forma parte del lote.

Como madres, las hijas únicas son exigentes, si bien cuidan menos a sus hijos que otras madres. Se dará por satisfecha teniendo sólo una hija. Si tiene un hijo, verá en él más características de su padre que de su marido.

Mellizos y Gemelos.

Pueden polarizarse y representar uno el linaje paterno y el otro el linaje materno. Su vinculación especial les hace muy intuitivos. Con respecto a otros hermanos, es habitual que actúen en coalición.

Si son niño y niña, los roles se determinarán en función de los padres. Si el padre es el mayor y la madre la menor de sus hermanos, el niño asumirá el rango de mayor y la niña el de menor, aunque no hayan nacido en ese orden. Es decir, si no hay más hermanos, asumen roles de posiciones filiales habituales. Cuando los mellizos o gemelos tienen hermanos menores, aprenden roles de hermanos mayores de hermanas y hermanos, según cada caso.

Hijos Adoptados.

La clave está en las circunstancias del momento de su llegada a la familia. Si se incorpora antes que sus hermanos (biológicos o también adoptados), todo será más fácil para él. Si lo hace después, su presencia trastoca todo el sistema de rangos ya existente, lo que puede originar reubicaciones, rivalidades y conflictos de identidad.

El hijo adoptado se beneficia de una mayor protección por parte de los padres tanto en el seno familiar como hacia el exterior. Sin embargo, puede ser considerado como un intruso o un competidor por los otros hermanos.

Según vaya creciendo, podrá sufrir un conflicto de lealtad con los padres adoptivos si alguna vez desea de conocer o saber algo de sus padres biológicos, hacia los que podrá sentir resentimiento en unos casos o mucha pena en otros.

Fuente: soyespiritual.com

martes, 21 de mayo de 2024

El Despertar y la Conciencia de Unidad.

En el proceso evolutivo de nuestra alma no existe un camino trazado que marque un rumbo fijo ya que todo en el universo, es impermanente.

Existe un proceso evolutivo que realizamos vida tras vida, es así que en cada experiencia vamos alcanzando “estados” de conciencia”, y sólo para que la mente dual lo interprete alcanzamos “niveles “, y en esos estados de conciencia permanecemos alerta a todo lo que sucede, tanto dentro como fuera de uno mismo, simultáneamente. Prendemos la luz de la conciencia, eso es el despertar.

La conciencia se desarrolla pasando por diferentes estados. Estos son: el instinto, las emociones, el pensamiento (concreto y abstracto), la conciencia de sí, la conciencia de unidad, la conciencia de Ser.

En este artículo me referiré sólo a la Conciencia de Unidad.

¿Qué significa la conciencia de unidad?

La Conciencia de Unidad es el último estado en el proceso evolutivo de la conciencia. Es la percepción de que no hay separación, que somos parte de un todo. La mente no crea separabilidad pues es todo contenido en ese estado de conciencia.

¿Y cómo es que la mente regularmente separa la conciencia?

“Cuando un hombre piensa en aquello que percibe, necesariamente se siente separado de ello. Es decir, lo concibe como algo externo a él mismo.

 Es así como ‘el pensador’ queda separado y fragmentado en ‘yo’, y concibe lo demás como ‘no yo’. Cuando se activa el pensamiento, inmediatamente, surge la fragmentación. Esta fragmentación está formada precisamente por el ‘pensador’ en un extremo y por ‘lo pensado’ en el otro. El pensamiento y el pensador no son dos actividades diferentes y separadas sino sólo una. Tan pronto el pensamiento se detiene, el pensador se diluye junto con él y, por lo tanto, la sensación de fragmentación que produce.

En el momento que el pensamiento se detiene y el hombre permanece absolutamente alerta, se presenta la vivencia de unidad, el eterno presente porque es intemporal.

Como no hay separación, no hay muerte y nacimiento, no hay bien ni mal, no hay objeto y sujeto, porque se desvanece la identidad, No existe el yo separado, es una ilusión, si existe una identidad suprema, el Todo. Podemos percibir que no existe el tiempo porque no existe ni pasado ni futuro.

La conciencia de unidad es un estado de alerta percepción.

En el cual se produce la sensación de unión con lo percibido; se produce la sensación de “todo es uno”. La conciencia de unidad implica la ausencia de pensamiento para poderse presentar, ya que, esté separa al pensador de lo pensado, al observador de lo observado.  Es así como la mente queda silenciosa, cristalina como el agua. Y en este estado de transparencia “el que percibe” y “lo percibido” se diluyen, para sólo quedar en su lugar, “el percibir”. El observador y lo observado se hacen uno cuando la percepción es alerta y el pensamiento está ausente.

Ken Wilber dice sobre la conciencia de unidad: “el presente es un momento sin límites espaciales o temporales y por eso los místicos abrazan al tiempo en su totalidad. Entonces, la conciencia de la unidad es el ahora eterno. Uno no tiene experiencias presentes, uno es las experiencias presentes. No hay delante de uno ni detrás. Y uno no tiene donde quedarse, a no ser en el presente intemporal, en la eternidad.”

Cuando ese estado ha madurado, entonces ese hombre tiene una calidad diferente al hombre común y corriente. Ese hombre se sienta en un jardín y entonces, empieza con su propia conciencia a ver el mundo que le rodea. Y al verlo con profunda atención, hay un momento en el cual la conciencia no puede separarse de aquello que está percibiendo: se empieza a experimentar sumamente unido a todo.

Si esta conciencia de unidad madura y llega a un clímax profundo, ya no solo me experimento unido al exterior, sino que me hago uno con el exterior: soy el árbol, soy el pájaro que vuela, soy el agua que cae, soy los niños que ríen, lo soy.

¿Pero cómo vas a experimentar esa unicidad con todo lo que percibes?

Esto se logra porque no hay una actividad mental, como el pensamiento que me esté separando de aquello que percibo y me informe: “ese es un señor”, “ese es un árbol”, “esa es un ave”, “ese es el sonido de una máquina”. Pero cuando estoy en este estado de absoluta contemplación, con plena conciencia del exterior, no hay un fenómeno de separación entre el sujeto y el objeto. Entonces me experimento unido; empieza una sensación de que todo es una sola cosa. Todos estamos unidos y culmina este estado como único: YO SOY Todo eso. Es un estado avanzado. 

El primer estado para alcanzar la conciencia de ser Absoluto es permanece atento y despierto y te darás cuenta de que “yo soy yo” de que “eso es eso”. En este primer estado no me puedo separar del árbol, pero hay una clara consciencia de que “yo soy yo” y de que “eso es eso” (el árbol). En este primer estado no me experimento siendo uno con el árbol. Pero si lo sigo observando en perfecto estado de absoluta atención y conciencia, llega un momento en que se pierde la referencia de “yo soy yo” y de que “eso es eso” y me empiezo a experimentar tan unido al árbol que finalmente me hago uno con el árbol. Es decir, que obtengo la conciencia de ser el árbol sin confusión de ningún tipo.

La conciencia es como una luz que cuando alumbra algo no te separa de ello, sino que te une a ello, mientras que la mente y sus pensamientos te separan. No son los sentidos, sino los contenidos de la mi mente lo que te separa. Son tus propios pensamientos los que te informan: no, tú estás aquí sentado y ese árbol está ahí. Luego entonces, tú estás aquí y el árbol está separado de ti. Eso es lo que te informan tus propios pensamientos. Pero, en el estado de mi conciencia perfectamente despierta, eso no es real. No me puedo separar de lo que percibo, me experimento unido y me empiezo a fundir con todo, o a unir con todo.

Autor : Mary Bernedo Fuente: hermandadblanca.org
Referencias :
Ken Wilber (1987) La conciencia sin fronteras – Editorial Kairos, Barcelona.
El hombre despierto, el despertar místico – Shambhu

sábado, 18 de mayo de 2024

Los Discursos de Jesús – Extracto de Documento 162– El Libro de Urantía El Sermón sobre la Luz del Mundo.

El Sermón sobre la Luz del Mundo

Por la noche del penúltimo día de la fiesta, cuando se encontraba la escena brillantemente iluminada por las luces de los candeleros y de las antorchas, Jesús se paró en el medio de la multitud reunida y dijo: “Yo soy la Luz del Mundo. El que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la Luz de la Vida. Presumís enjuiciarme y sentaros para juzgarme, y declaráis que, si doy testimonio e mí mismo, mi testimonio no puede ser verdadero. Pero la criatura no puede enjuiciar al Creador. Aunque doy testimonio de mí mismo, mi testimonio es eternamente verdadero, porque sé de donde vine, quién soy, y adónde voy. Vosotros, que queréis matar al Hijo del Hombre, no sabéis de dónde vine, quién soy ni adónde voy.

Vosotros juzgáis sólo por las apariencias de la carne; no percibís las realidades del espíritu. Yo no juzgo a ningún hombre, ni siquiera a mi archi-enemigo. Pero si decidiera juzgar, mi juicio sería verdadero y recto porque yo no juzgaría solo, sino con mi Padre que me envió en el mundo, y que es la fuente de todo juicio verdadero. Aún vosotros decís que se puede aceptar el testimonio de dos personas confiables: pues bien, yo atestiguo estas verdades; y también lo hace mi Padre en el cielo. Y cuando ayer yo os dije esto mismo, en vuestras tinieblas me preguntasteis, “¿dónde está tu Padre?”. En verdad no me conocéis a mí ni a mi Padre, porque si me conocierais a mí, también conoceríais a mi Padre”.

“Ya os he dicho que yo partiré, y que me buscaréis, pero no me encontraréis, porque adonde yo voy, vosotros no podéis venir. Vosotros, los que rechazáis esta luz, sois de la bajo; yo soy de lo alto. Vosotros, los que preferís sentaros en las tinieblas, sois de este mundo; yo no soy de este mundo, y vivo en la luz eterna del Padre de las luces. Ya habéis tenido abundantes oportunidades para aprender quien soy yo, pero tendréis aún otra prueba que confirma la identidad del Hijo del Hombre. Yo soy la luz de la vida, y todo aquél que rechace deliberadamente y a sabiendas esta luz salvadora, morirá en sus pecados. Mucho tengo que deciros, pero sois incapaces de recibir mis palabras. Sin embargo, aquél que me envió es Verdadero y Fiel; mi Padre ama aún a sus hijos descarriados. Y todo lo que mi Padre ha hablado, yo también proclamo al mundo”.

“Cuando el Hijo del Hombre sea elevado, entonces conoceréis que yo soy él, y que no he hecho nada por mí mismo, sino según me enseñó el Padre. Hablo estas palabras para vosotros y para vuestros hijos. Aquél que me envió, aun ahora está conmigo; no me ha dejado solo, porque yo hago siempre lo que a él le agrada”.

Al enseñar así Jesús a los peregrinos en los patios del templo, muchos creyeron. Y ningún hombre se atrevió a arrestarlo.

El último día, el gran día de la fiesta, cuando la procesión proveniente del estanque de Siloé pasó a través de los patios del templo, e inmediatamente después de que los sacerdotes echaron el agua y el vino en el altar, Jesús, de pie entre los peregrinos, dijo: “El que tenga sed, que acuda a mí y beba. Del Padre en lo alto traigo a este mundo el agua viva. El que cree en mí se llenará del espíritu que esta agua representa, porque aún las Escrituras han dicho: “de él fluirán ríos de agua viva”. Cuando el Hijo del Hombre haya completado su obra en la tierra, se derramará sobre toda la carne el Espíritu vivo de la Verdad. Los que reciban este espíritu jamás tendrán sed espiritual”.

Jesús interrumpió el servicio para hablar estas palabras. Se dirigió a los adoradores inmediatamente después del canto del Halel, la lectura de los salmos acompañada por el ondear de las ramas ante el altar. En ese momento, había una pausa mientras se preparaban los sacrificios, y fue en ese momento que los peregrinos escucharon la voz fascinadora del Maestro declarar que él era el dador del agua viva para todas las almas con sed de espíritu.

Al concluir de este servicio matutino, Jesús continuó enseñando a las multitudes, diciendo: “¿Acaso no habéis leído en las Escrituras: “¿He aquí que las aguas caen sobre la tierra y las bebe el suelo reseco, así otorgaré yo el espíritu de santidad para que lo beban mis hijos en una bendición que llegará hasta los hijos de sus hijos? ¿Por qué tenéis sed del ministerio del espíritu mientras tratáis aplacar la sed de vuestra alma con el agua de tradiciones de los hombres, vertida de las jarras rotas del servicio ceremonial? Lo que veis aquí en este templo es la forma en que vuestros padres intentaron simbolizar la efusión del espíritu divino sobre los hijos de la fe, y habéis hecho bien en perpetuar estos símbolos, aún hasta el día de hoy. Pero ahora, a esta generación ha llegado la revelación del Padre de los espíritus, a través de la efusión de su Hijo, y todo esto será certeramente seguido por l efusión del espíritu del Padre y del Hijo sobre los hijos de los hombres. Para todo el que tenga fe, esta efusión del espíritu será el verdadero maestro del camino que conduce a la vida eterna, a las verdaderas aguas de la vida en el reino del cielo sobre la tierra y allende en el Paraíso del Padre”.

Y Jesús continuó contestando las preguntas de la multitud y de los fariseos. Algunos lo consideraban un profeta; otros, creían que él era el Mesías; y aún otros decían que no podía ser el Cristo puesto que venía de Galilea, y que el Mesías debía restaurar el trono de David. Pero, aun así, no se atrevieron a arrestarlo.

Fuente: Extractos de Documento 162 – El libro de Urantía
En Amor y Servicio Incondicional,
Viviana Rodriguez Cortejarena –
http://www.vivianarodriguez.com

jueves, 16 de mayo de 2024

El Peregrino.

Podemos dividir la vida del Peregrino en tres períodos principales:

1. El período en que está influida por el rayo de la personalidad.

2. El período en que está influida por el rayo del ego.

3. El período en que está regida por el rayo monódico.

El primer período es mucho más prolongado que los otros dos; y abarca la vasta progresión de los siglos durante los cuales se desarrolla el aspecto actividad del triple yo. Las vidas trascurren una tras otra, durante las cuales se forja lentamente el aspecto manas o mente, y el ser humano es controlado cada vez más por su intelecto, actuando por medio de su cerebro físico.

Los siglos pasan y el hombre va siendo cada vez más inteligente; el campo de acción de su vida es cada vez más apropiado para la entrada de este segundo aspecto.

El segundo períodoen que domina el rayo egoico, no es comparativamente tan prolongado… caracteriza a esas vidas del hombre en que pone sus fuerzas del lado de la evolución, se somete a disciplina, entra en el Sendero de Probación y va ascendiendo hasta la tercera Iniciación. 

El tercer período es el más corto… Señala el período de realización, de liberación, y aunque es el más corto visto desde abajo, es de relativa permanencia visto desde el plano de la Mónada.

“Sigue tu camino, oh Peregrino, con firme perseverancia. No existe candil ni lámpara terrenal alimentada con aceite. Acrecienta continuamente la irradiación hasta que el sendero termine en una llamarada de gloria, y el viajero de la noche se convierta en el hijo del sol y atraviese los portales de ese radiante orbe”.

 

El Peregrino Atento.

Atiende oh Peregrino, la entonación de la palabra por los Grandes Señores dévicos. Aquieta toda vibración terrena; apacigua las inquietas luchas de la mente inferior, y con oído atento escucha los sonidos que se elevan hasta el trono del Logos. Sólo los puros de corazón pueden oír, sólo los gentiles pueden responder.

Los tormentosos sonidos de las luchas terrenas, las agudas vibraciones de la esfera acuosa, la explosiva nota que marca el lugar del pensamiento, apagan el sonido y oscurecen el tono. Aquel que está silente, tranquilo y calmo internamente, que todo lo ve por medio de la luz divina, y no es guiado por la luz reflejada dentro de las triples esferas, es aquel que en breve oirá. Desde el éter circundante, una nota hará impacto en su oído, distinta de los tonos emitidos en el mundo terrestre.

Atiende oh Peregrino, porque cuando ese sonido hace impacto sobre el sentido interno, con una vibración colorida, debes sabe que se ha logrado un punto que señala una gran transición.

Observa oh Peregrino la llegada de esa hora. Con esfuerzo purificado asciende más cerca del Sonido. Debes saber que su ton se desliza a través de la brumosa alborada o cuando la suave luz del sol golpea suavemente al oído pronto el oído interno se convertirá en un sentimiento expandido y cederá su lugar a la visión y perfecta comprensión.

Has de saber que cuando la música de las esferas te llegue nota tras nota en el brumoso amanecer, en el soleado mediodía en la frescura de la tarde o en la reverberación a través de la noche profunda, en su rítmico tono reside la secreta revelación.

Las seis Reglas del Sendero (Reglas del Camino):

I. El Camino se recorre a la plena luz del día, la cual es proyectada sobre el Sendero por Aquellos que saben y guían. Nada puede ocultarse, y en cada vuelta de ese camino el hombre debe enfrentarse a sí mismo.

II. En el Camino lo oculto es revelado. Cada uno ve y conoce la villanía del otro. No encuentro otra palabra para traducir la antigua palabra que designa la estupidez y la vileza no reveladas, la burda ignorancia y el propio interés, características sobresalientes del aspirante común. Sin embargo, a pesar de esa gran revelación, no es posible volver atrás, despreciar a los demás ni vacilar en el Camino. El Camino va hacia el día.

III. Ese camino no se recorre solo. No hay prisa ni apremio. No hay tiempo que perder. Cada peregrino, sabiéndolo, apresura sus pasos y se encuentra rodeado por sus semejantes. Algunos logran pasar ade­lante, él los sigue. Otros caminan detrás, él marca el paso. No camina solo.

IV. Tres cosas debe evitar el peregrino. Llevar un capuchón o velo, que oculte su rostro a los demás, un cántaro que sólo contenga suficiente agua para sus propias necesidades y, un báculo sin horqueta.

V. Cada Peregrino en el Camino, debe llevar consigo lo necesario; un brasero para dar calor a sus semejantes; una lámpara para iluminar su corazón y mostrar a sus semejantes la naturaleza de su vida oculta; una talega con oro que no ha de esparcir por el Camino sino compartirlo con los demás; una vasija cerrada donde guarda todas sus aspi­raciones para arrojarlas a los pies de Aquel que espera en el portal para darle la bienvenida.

VI. A medida que el Peregrino recorre el Camino debe tener el oído atento, la mano dadivosa, la lengua silenciosa, el corazón casto, la voz áurea, el pie ligero y el ojo, que ve en la luz, abierto. Él sabe que no camina solo.
 

Recopilado de los libros de Alice A. Bailey y El Maestro Djhwal Khul Fuente: tsering.cl