Reconozcan la
Unidad de Toda la Creación
Los Vedas declaran, Aham Brahmasmi (Yo soy Brahmán) et
Tattvamasi (Tú eres Aquello). Estas dos declaraciones védicas afirman dos cosas:
Yo y Brahmán, y Aquello y Tú. La verdadera sabiduría está en ver la unicidad.
“La experiencia del no dualismo es verdadera sabiduría” (Advaita Darshanam
Jñanam). Es una señal de ignorancia el ver dualidad al desconocer la unidad
subyacente. Dualidad no es Verdad. De esta manera fue que Buda inquirió a fondo
y finalmente tuvo la experiencia de “Yo soy Yo”.
Esa es la verdadera realización. Pueden hacer
penalidades durante muchos años, pueden meditar y llevar a cabo muchas
prácticas yóguicas, pero todas esas prácticas espirituales dan solamente una
satisfacción temporal, no bienaventuranza sempiterna. Algunas personas hablan
de meditación. Hasta Buda predicó la práctica de la meditación. ¿Qué es sobre
lo cual meditan? ¿Qué se quiere decir por meditación? ¿Significa concentrarse
en un objeto en particular? No, no. Eso no es meditación en absoluto. El
contemplar sobre el principio de “Yo soy Yo” es verdadera meditación. Ninguna
otra práctica espiritual (sadhana) puede igualar esto.
Mientras tengan el sentimiento dualista de ‘tú y yo’,
no podrán experimentar la unidad. Buda reconoció el principio de la unidad y
basó su vida en esta verdad. Bajo la dirección de muchos yoguis, él había
practicado varias clases de meditación y penalidades, pero finalmente encontró
que ellas eran mera pérdida de tiempo ya que ninguna de éstas podía llevarlo a
la experiencia última de la unicidad. Él sintió haber desperdiciado su tiempo
de tal manera. Uno debe encontrar la plenitud en la vida haciendo un uso
apropiado del tiempo. Ese es el deber primordial del hombre.
Muchas personas llevan a cabo diferentes tipos de
prácticas espirituales como la repetición del nombre y la meditación sin
reconocer el principio de la unidad. La lengua pronuncia el nombre de Rama pero
hay un vacío en el corazón. Esto es mera pérdida de tiempo. En vez de perder su
tiempo de tal manera, emprenda servicio social, viendo a Dios en cada uno. Eso
es verdadera práctica espiritual. Reconozcan la divinidad innata en todos los
seres.
En la creación, parece haber dos entidades, usted y
yo. Pero usted y yo somos en realidad uno. El individuo (vyashti) es una parte
de la sociedad (samashti), y samashti es una parte de la creación (shrishti)
que emergió de Dios, el Parameshti. Este Parameshti es el Principio de Brahmán
o Parabrahma Tattva. Esa es la base fundamental de la creación entera. De esta
manera, es que deben reconocer la unidad de toda la creación. Sólo entonces
pueden ustedes alcanzar el principio de Brahmán o Parmeshti. Cada cual tiene
que recordarse repetidamente, “Yo soy Parameshti, yo soy Parameshti”. Todos son
encarnaciones del Atma y todos están sostenidos por el Atma. Buda experimentó
la unidad de toda la creación. Hubo una transformación total en él una vez que
él alcanzó la visión del Ekatma, la unicidad del Atma.
Él se dio cuenta de que todas las relaciones mundanas
como madre, padre, esposa, hijos eran falsas. Trascendió la conciencia del
cuerpo. Por esto es que se ganó el apelativo de Buddha (el iluminado). El
hombre debe usar su inteligencia o buddhi para comprender este principio de
unidad. Buddhi es de dos tipos. El intelecto que ve la diversidad en la unidad
es inteligencia mundana. El hombre debe desarrollar la inteligencia espiritual
(adhyatmic buddhi) a fin de realizar la unidad subyacente de toda la creación.
Esto les da la experiencia del principio átmico que es el mismo en toda la
creación. Buda alcanzó la visión del Atma. Después de esta experiencia, él
siguió enseñando que existe un solo principio divino en el mundo.
Buda enseñó que el principio de unidad del Atma era el
único principio verdadero en el mundo. El que lo realiza usando su inteligencia
espiritual es un verdadero Buddha, decía él. Fuera del Atma no existe nada en
este mundo.
En este mundo transitorio y efímero, hay una sola cosa
que es verdadera y eterna. Esa es la divinidad. Esa es a lo que cada cual debe
aspirar. Satyam Sharanam Gachchhami ((Yo me refugio en la verdad). Ekam
Sharanam Gachchhami (Yo me refugio en el principio de unicidad). Todo es
manifestación de la divinidad en este mundo; no hay segunda entidad fuera de la
divinidad. Es el principio divino que gobierna al mundo enero. Habiendo
realizado esta verdad, Buda, junto con sus discípulos, iba de aldea en aldea
propagándola. Él nunca sintió la necesidad de descansar. Él pensaba que era su
deber compartir este supremo conocimiento con sus semejantes. Hasta su padre
Suddhodhana vino a Él. Él también reconoció esta verdad y fue transformado.
¿Qué fue lo que Buda enseñó? Buda enseñó que cada cual estaba provisto del mismo
principio de divinidad. “La verdad es una, pero el sabio se refiere a ella por
varios nombres” (Ekam Sat Vipraha Bahudha Vadanti). El mismo mensaje fue el
transmitido por el Señor Krishna en el Bhagavad Gita cuando Él dijo que todos
los seres eran Su propio reflejo, y que nadie era diferente de Él.
Buda tuvo que pasar por muchas penalidades para
realizar esta verdad. Muchas nobles almas contemporáneas de Buda reconocieron
la grandeza de Buda. Dijeron que Buda había experimentado la verdad que ellos
eran incapaces de experimentar. Ya que él abandonó todo deseo, Buda se volvió
el epítome de la renunciación total. No había nada en él excepto amor. Él
consideraba el amor como su mismo aire vital. Carente de amor, el mundo se
volvería un vacío.
Traten de Comprender la Profundidad de las Enseñanzas
de Buda
Cuando ustedes ofrecen sus salutaciones a alguien, comprendan que están
saludando a su propio ser. Ese alguien no es otro que el propio reflejo de
ustedes. Vean a los otros igual que si vieran a su propio reflejo en el espejo.
Este es el mensaje que transmite el gran axioma Aham
Brahmasmi Los nombres y las formas pueden ser diferentes, pero todos los seres
son parte integral del mismo principio divino. Pueden llamar esto un pañuelo.
Pueden llamar esto una túnica. Pero ambos están hechos de algodón. De igual
forma, la divinidad es el principio subyacente en la aparente multiplicidad de
este mundo. hoy en día muchos de los llamados escolásticos están predicando
sólo la multiplicidad. Pretenden que han dominado las escrituras y tratan de
interpretarla a su propia manera con su conocimiento limitado. Sus
interpretaciones no corresponden a la realidad. Añaden solamente a la
confusión.
Buda enseñó que no deberíamos tener ninguna ira, que
no debemos buscar las faltas de los demás, que no debemos hacer daño a los
otros, porque todos son encarnaciones del puro y eterno principio del Atma.
Tengan compasión por los pobres y ayúdenlos en la medida de lo posible. Piensan
que los que no tienen comida para comer son gentes pobres. No pueden llamar a
alguien pobre sólo porque no tiene dinero o comida que comer. En verdad, nadie
es pobre. Todos son ricos, no pobres. Aquellos a quienes ustedes consideran
pobres pueden no tener dinero, pero todos están provistos de la riqueza del corazón
(hridaya).
Comprendan y respeten este principio subyacente de
unidad y divinidad en todos y experimenten la bienaventuranza. No tengan esas
estrechas consideraciones de que fulano es su amigo, zutano su enemigo,
perencejo su pariente, etcétera. “Todo son uno, Sean iguales para Todos”. Ese
es su deber primordial. Esa es la enseñanza más importante de Buda. Pero la
gente no indaga en las enseñanzas de Buda y no comprende la santidad de su
corazón. Hablan solamente de su historia. En verdad, Buda no es un solo
individuo.
Todos ustedes son Budas. Ustedes verán la unidad en
todas partes una vez que comprendan esta verdad. Hay unidad en la aparente
multiplicidad. Si están rodeados de muchos espejos, verán una cantidad de
reflejos suyos. Los reflejos son muchos pero la persona es una. Las reacciones,
reflejos y resonancias son muchas pero la realidad es una. Cuando Yo hablo
aquí, mi voz se oye a través de cada uno de los altoparlantes en este salón. De
igual manera, en nuestros corazones existe el principio de unidad que tenemos
que reconocer. La vida del hombre encuentra plenitud solamente cuando su mente
experimenta el principio de unidad. De nada sirve llevarles la unidad a la
gente sin unir sus mentes. “La mente es la causa de la esclavitud y de la
liberación del hombre.” (Manah Eva Manushyanam Karanam Bandhamokshayo).
Ven a alguien y dicen que es una persona mala; ven a
otra y dicen que es buena. Pero, en realidad, lo bueno y lo malo están
presentes en su mente y no en las personas a su alrededor. Llaman este pañuelo
blanco y este micrófono negro. La diferencia de color es percibida por sus
ojos, pero esencialmente negro y blanco son uno y el mismo. Cada cual debe
hacer esfuerzos por visualizar la unidad en la diversidad. Sólo entonces puede
uno experimentar la divinidad.
Los principios enseñados por Buda tienen profunda
significación, pero la gente no está tratando de comprenderlos. Pueden observar
que Buda tenía el pelo rizado en su cabeza. Un rizo de pelo estaba entrelazado
con el otro. Hay un mensaje subyacente de unidad en esto. Él tenía un solo
sentimiento en su corazón, el sentimiento del amor. Él enseñó, “Dharmam
Sharanam Gachchhami (Yo me refugio en la rectitud), “Premam Sharanam
Gachchahami” (Yo me refugio en el amor). Privada de amor, la cualidad humana no
tiene existencia.
Debemos amar a todos, sin importar si es un indigente
o un rico. El dinero no debe ser el criterio para compartir su amor con sus
semejantes. El dinero no es importante. El dinero viene y se va, la moralidad
viene y crece. No hagan daño a nadie. Ayuden Siempre, Nunca Dañen. Sólo
entonces pueden alcanzar el estado de Buda.
De poco servirá dar largas charlas si no concientizan el principio de unidad en
la divinidad. Pueden llamar a Dios por cualquier nombre como Rama, Krishna,
Buddha, Sai, etcétera, pero todos ellos personifican el mismo principio divino.
Mantengan la flor de la unicidad en el Altar de sus
corazones y dejen que su fragancia se expanda por doquier. Las prácticas
espirituales tales como la repetición del nombre no darán el resultado deseado
a menos que reconozcan el principio de unidad. Muchas personas cuentan las
cuentas del rosario. Pero, ¿de qué sirve darle vueltas al rosario si su mente
también continúa dando vuelta al mundo? Comprendan que la mente es de lo más
importante. Deben tener una mente firme. Sólo entonces será su vida redimida.
¿De qué sirve si la mente revolotea alrededor de cada objeto como las moscas
que revolotean tanto por la basura como por los dulces?
No dejen que su mente vacile entre lo bueno y lo malo,
la unidad y la multiplicidad. Enfóquenla en todo lo que es bueno y concientizen
el principio de unidad. Ese es el camino real que los llevará a la experiencia
de la verdad. Por el contrario, si dejan que su mente siga el camino torcido,
no los llevará a ninguna parte.
El mismo principio divino del amor está presente en
todos ustedes. Si toman el camino del amor, se volverán Budas ustedes mismos.
Hoy es Buddha Purnima, el Aniversario de Buda. Purnima significa luna llena. El
mensaje subyacente de Buddha Purnima es que la mente debe brillar con total
pureza como la luna llena. Deben unirse con su fuente, es decir, el Atma que es
puro y refulgente. No hay oscuridad en la noche de luna llena. En este
auspicioso día de Buddha Purnima, debemos lograr la plena pureza de mente.